La épica final del Clausura 2013 entre América y Cruz Azul

Una de las finales mas recordadas de la Liga Mexicana, fue la que protagonizaron América y Cruz Azul en el Clausura 2013.

Los «cementeros» se impusieron 1 a 0 en la ida con gol de Christian Giménez, por lo que la eliminatoria quedaba abierta para definirse en el Estadio Azteca.

Las cosas se complicaron de entrada para las «águilas», Jesús Molina se fue expulsado a los 13 minutos, y a los 20 el colombiano Teófilo Gutiérrez marcaba el gol para Cruz Azul, que parecía comenzar a sentenciar la final.

Con un hombre de menos desde la primera parte, y necesitando hacer dos goles para forzar la prórroga, el equipo dirigido por Miguel Herrera fue por la heroica en la segunda parte.

La lluvia arreciaba sobre el Coloso de Santa Úrsula, y le daba un tinte mas dramático a la final, a los 88 minutos Aquivaldo Mosquera empató el partido, y a los 92 el portero Moisés Muñoz se vistió de héroe para anotar el agónico 2 a 1 para los locales, y así el partido se iba a tiempo extra.

América aguantó como pudo y sostuvo el triunfo para llegar a los penaltis, allí no fallaron, marcaron Raúl Jiménez, Christian Benítez, Osvaldo Martínez y Miguel Layún, fue 4-2 para las «aguilas», que de esa manera obtenían el título número 11 en su palmarés.

Antony Callero

Alavés roza la hazaña ante el Liverpool

El 16 de Mayo de 2001, el Alavés se enfrentó al poderoso Liverpool en la final de la Copa UEFA, partido disputado en el Westfalenstadion de la ciudad alemana de Dortmund.

Sin dudas que el Liverpool -que tenía como grandes figuras a Steven Gerrard y Michael Owen-, aparecía como el gran candidato al título, después de eliminar a Olympiacos en Dieciseisavos de Final, a la Roma en Octavos, Porto en Cuartos y Barcelona en semifinales.

Del otro lado el sorprendente Alavés, que tras eliminar al Rosenborg y al Inter de Milán, el camino se le allanó un poco, en Cuartos superan al Rayo Vallecano, y en semis al Kaiserlaustern.

La final fue algo sencillamente espectacular, de los mejores partidos que se recuerden. A los 16 minutos el Liverpool había sacado 2 goles de ventaja con los tantos de Markus Babbel y Steven Gerrard, descontó el uruguayo Iván Alonso para el equipo español a los 27, pero antes del descanso Gary McAllister puso el 3 a 1.

Tras el paso por los vestuarios, el Alavés comenzó con mucho ímpetu la segunda mitad, y llegó a la igualdad rápidamente con los tantos convertidos por Javi Moreno a los 48 y 51 minutos de juego.

Se adelantaron los «reds» a los 73 por intermedio de Robbie Fowler, pero a los 89 Jordi Cruyff consiguió un milagroso tanto para llevar el partido a la prórroga (4-4).

Al final la moneda al aire cayó del lado del Liverpool, a los 117 minutos Delfi Geli en propia puerta marca el 5 a 4 para los británicos, que se consagraban de esa manera por tercera vez como campeón de la UEFA.

Aquel equipo dirigido por Mané rozó la hazaña europea, pero delante estaba nada menos que el gran Liverpool, uno de los mejores clubes del fútbol mundial, fue un partidazo inolvidable.

Antony Callero

Cuba echando del Mundial a Rumania

En Francia 1938 se produjo la primera y única participación de Cuba en una Copa del Mundo, y la misma no pasaría desapercibida.

Clasificaron al torneo sin disputar ningún partido en fase previa, ya que sus rivales se retiraron antes argumentando diferentes motivos.

Quedó emparejado con Rumania en Octavos de final, un duelo que parecía ser accesible para los europeos, pero…

El 5 de Junio en el Stade Chapou de Toulouse, ante unos 7.000 espectadores, el equipo cubano plantaba cara.

Silviu Bindea a los 35 adelantó a los rumanos, pero Héctor Socorro a los 44 ponía el empate parcial. En la segunda mitad José Magriñá a los 69 ponía adelante a los isleños, pero Iuliu Baratky a los 88 marcó el empate para forzar la prórroga.

El partido era loco y podía ser para cualquiera, Héctor Socorro volvió a marcar a los 103, pero Stefan Dobay a los 105 decretó el 3 a 2 definitivo.

Como hasta ese entonces los penaltis no estaban instaurados aún, se jugó un partido desempate 4 días después en el mismo estadio, y allí los cubanos dieron la campanada.

Se sobrepusieron al gol de Dobay al minuto 35, y con los tantos de Socorro a los 51 y Tomás Fernández a los 57 consiguieron remontar y meterse entre los 8 mejores del mundo.

Como dato anecdótico, digamos que el seleccionado cubano se presentó al torneo con solo 15 futbolistas.

Pero lo mas curioso lo protagonizaría el portero Carvajales, quién era comentarista deportivo para una emisora de radio de su país, jugó el primer partido, pero en el segundo dio lugar al portero suplente Ayra, y el se dedicó a la suyo, insólito.

Con el deber ya cumplido, e intentando conseguir otra hazaña, el 12 de Junio debían enfrentar a Suecia en el Estadio Fort Carreé de Antibes.

Pero esta vez la historia no tendría final feliz, los suecos no dieron opciones a sus rivales, fue goleada 8 a 0 con sendos hat-tricks de Harry Andersson y Karl Gustaf Wetterstrom, y conquistas de Tore Keller y Arne Nyberg.

Hay que decir que Cuba, corto de plantel, y jugando 3 partidos en una semana, enfrentó a un equipo sueco que llegaba totalmente descansado, ya que clasificó a Cuartos de Final sin jugar, tras el retiro de Austria, que fuera anexada a territorio alemán.

Así terminaba esta curiosa participación cubana en su único mundial de fútbol.

Antony Callero

Grandioso partido entre Alemania y Francia y primera definición por penales

Alemania y Francia protagonizaron uno de los partidos mas recordados de la historia de los Mundiales, ocurrió el 8 de Julio de 1982 en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán de la ciudad de Sevilla.

Germanos y galos se jugaban un boleto a la gran final y no defraudaron, fue un auténtico partidazo donde no se dieron tregua.

La Francia de Platini, Giresse, Tiganá, Amorós, Bossis, Rocheteau entre otros, llegaba como gran favorita, pero no pudo ratificarlo en el campo de juego, donde enfrentó a un muy duro rival como es Alemania.

Pierre Littbarski, aquel muy buen extremo alemán, abrió la cuenta a los 17 minutos, pero el legendario Michel Platini igualó de penalti a los 28.

En la segunda parte estaba mejor Francia, pero a los 62 minutos se produce una jugada que podría haber cambiado el destino del partido. Pase de Platini a Patrick Battiston, que subió al ataque, el defensor llega primero al balón, y posteriormente se lleva un terrible golpe del portero Harald Schumacher.

La pelota se fue afuera, y el árbitro Corver increíblemente no expulsó a Schumacher por esa salvaje agresión, ni siquiera pitó la falta, en este caso era penalti. Battiston fue retirado inconsciente del terreno de juego, posteriormente se le diagnosticó conmoción cerebral, 2 dientes rotos y fractura de clavícula.

En los minutos finales los dos tuvieron para ganarlo, pero los porteros Ettori y Schumacher salvaron a sus respectivos equipos.

La prórroga fue una auténtica locura, parecía que lo ganaba Francia cuando sacó 2 goles de ventaja, gracias a los tantos de Marius Tresor a los 93 y Alain Giresse a los 99.

Pero los germanos nunca se rinden, Derwall dio ingreso a Rummenigge, que estaba algo sentido, pero el crack del Bayern no lo defraudó, consiguió el descuento a los 103, mientras que lo empató Klaus Fischer a los 108.

En los penales -la primera tanda de la historia de los Mundiales- el triunfo fue para el equipo dirigido por Derwall con tanteador de 5 a 4; Maxime Bossis marró su penalti, y el «tanque» Hrubesch se encargó de poner el último, y dar el pase a Alemania a la gran final, donde le esperaba Italia.

Antony Callero

«La Batalla de Berna»

Un 27 de Junio de 1954, en el Wankdorfstadion de la ciudad de Berna, Hungría y Brasil se enfrentaban por los Cuartos de Final de la Copa del Mundo.

Prometía ser un gran partido de fútbol, un duelo entre dos colosos, pero acabó transformándose en una auténtica batalla.

Los húngaros parecían sentenciar rápidamente el partido, a los 7 minutos estaban 2-0 arriba con los tantos de Nandor Hidegkuti y Sandor Kocsis. El partido de a poco se fue poniendo áspero, descontó Brasil por intermedio de Djalma Santos de tiro penal (1-2), resultado con el cual se irían al descanso.

En la segunda mitad el partido creció en rudeza, los «magyares» se pusieron 3-1 adelante con el tanto de Lantos de penalti, pero rápidamente descontó Julinho.

Los brasileños apelaron al juego brusco para frenar el gran juego del equipo húngaro, Nilton Santos se fue expulsado por una dura entrada, y también se marchó a las duchas Bozsik por reaccionar y tomarse a golpes de puño con su oponente.

Hungría siguió dominando las acciones, Sandor Kocsis -el goleador del torneo- marcó el 4-2 definitivo sobre el final, en tanto que el árbitro Arthur Ellis debió expulsar a Humberto por otra agresión.

El final fue caótico, futbolistas brasileños y aficionados que entraron al campo de juego intentaron golpear al árbitro, pero fueron repelidos por las fuerzas de seguridad suizas.

Posteriormente la trifulca continuó en zona de vestuarios. Puskas -que no jugó por lesión- se burló de los brasileños, que fueron tras él, sin embargo consiguió salir de la situación, lanzando una botella que impactó en la cabeza de Pinheiro, provocándole un corte, en tanto que el entrenador brasileño Zezé Moreira agredió también a su colega Gustav Sebes.

«Pensé que iba a ser el mejor juego que jamás hubiera visto. Estaba en la cima del mundo. Si la política y la religión tenían algo que ver con eso, no lo sé, pero se comportaron como animales. Fue una desgracia. Fue un partido horrible. En condiciones normales tendría que haber habido tantos expulsados que el partido tendría que haberse abandonado. Mi única intención era conseguir llevar el encuentro hasta el final», dijo el árbitro Ellis después del juego.

Pese a la batalla campal que se produjo en el final, la FIFA no sancionó a ningún futbolista, argumentando que el gran perjudicado sería Hungría, que continuaría en el torneo.

Los húngaros derrotarían a Uruguay en semifinales (4-2), en uno de los partidos mas emotivos de la historia de la Copa del Mundo, pero finalmente caerían en la final ante Alemania contra todo pronóstico.

Antony Callero

Dinamarca saca los colores a Uruguay

Dinamarca llegaba precedida de muy buenos antecedentes al Mundial de México 86, donde quedaba encuadrada en un grupo complicado con Alemania, Uruguay y Escocia.

El 8 de Junio en el Estadio Neza 86, Nezahualcóyotl, el equipo danés le endosaría a Uruguay su goleada mas humillante en la historia de los Mundiales.

El equipo de Sepp Piontek fue una máquina ese día, y le endosó un 6-1 fulminante a los celestes.

Preben Elkjaer Larsen a los 11 abrió la cuenta, aumentó Soren Lerby a los 41, pero un penalti convertido por Enzo Francéscoli a los 45 puso en partido a Uruguay.

El equipo «charrúa» ya jugaba con 10 hombres, ya que Miguel Bossio vio la cartulina roja al minuto 19.

La segunda parte fue un martirio para los sudamericanos, el excepcional Michael Laudrup aumentó la cuenta a los 52, Elkjaer Larsen a los 67 y 80 minutos, ponía su hatt-trick personal, en tanto Jesper Olsen a los 88 pondría el 6-1 definitivo.

La prensa uruguaya condenó al entrenador Omar Borrás como gran responsable de la derrota, tenía un buen plantel, pero jugaba un fútbol, totalmente defensivo, y monótono.

Los daneses formaron ese día con Trols Rasmussen, Soren Busk, Morten Olsen, Iván Nielsen, Jens Bertelsen; Henrik Andersen, Soren Lerby, Klaus Berggren, Frank Arnesen, Michael Laudrup y Preben Elkajer Larsen.

El equipo danés con aureola de favorito, cayó goleado 5-1 ante España en Octavos de Final, y así se despidió del torneo, pero dejando grandes momentos de fútbol.

Antony Callero

Corea del Norte da una de las campanadas mas grandes en la historia de los Mundiales

El seleccionado de Corea del Norte registra solo dos presencias en Copas del Mundo, 1966 y 2010.

Su debut en Inglaterra 66 fue todo un acontecimiento en su país, contaban con jugadores con escasa experiencia, en su mayoría militares, y para colmo tenían que afrontar un grupo muy difícil ante URSS, Chile e Italia.

El Jefe de Estado coreano, Kim Il-Sung fue el propio encargado de seleccionar a los futbolistas para el Mundial, y les pidió únicamente que trataran de no pasar verguenza.

En el estreno cayeron 3-0 ante la Unión Soviética, una actuación decorosa, teniendo en cuenta el poderío del equipo ruso.

En su segunda presentación empataron 1-1 ante Chile un gol muy celebrado por los coreanos, el primero en la historia de los Mundiales, anotado por Pak Seung-Zin a los 88 minutos de juego.

Ya con la moral en alto por el resultado conseguido, se jugaban sus últimas opciones de clasificación ante la toda poderosa Italia.

Todo hacía suponer una goleada del equipo italiano, sin embargo acabó siendo una de las hazañas mas grandes de la historia de este deporte.

Corea del Norte se impuso 1 a 0 contra todo pronóstico, con un tanto de Pak Doo-Ik a los 42 minutos, en partido disputado en el Ayresome Park de la ciudad de Middlesbrough.

El goleador del partido, Doo-Ik, era Sargento del ejército, y además Dentista de profesión, enfrentando a jugadores de primer nivel y con contratos millonarios como Mazzolla, Rivera o Facchetti.

Los futbolistas italianos declararon que para el segundo tiempo, fueron otros 11 futbolistas los que salieron al terreno de juego.

El parecido de todos hacía pasar desapercibida esa opción, aunque esto nunca pudo ser comprobado, lo cierto es que Italia hizo el papelón mas grande de su historia, y los coreanos se vistieron de héroes.

En Cuartos de Final enfrentaban a la temida Portugal de Eusebio. Ya habían cumplido, pero fueron por mas.

Goodison Park enloqueció cuando a los 25 minutos los coreanos estaban 3-0 arriba en el marcador.

Pero los lusos se pusieron serio, Eusebio anotó un «póker» y su compañero José Augusto liquidaron el pleito, fue 5-3 y una honrosa eliminación de los coreanos, que fueron recibidos como héroes en su país, e incluso el Jefe de Estado les dio un ascenso en sus rangos a todos quiénes participaron de esta gran gesta.

Cuentan las crónicas de la época, que Corea no tenía previsto avanzar a Cuartos de Final, por lo que no estaba esa opción en el presupuesto de dinero que habían llevado a Inglaterra.

De esta manera tuvieron que pedir alojamiento en un convento religioso, donde les proporcionaron techo y comida.

Así fue la exótica participación de Corea del Norte en su primer Mundial, dejando una huella imborrable, y quizás la mayor sorpresa en la historia de este deporte.

Antony Callero

Italia y Alemania protagonizan el partido del Siglo

En el Mundial de México 1970, Alemania e Italia se enfrentaron en semifinales, en un juego muy recordado y que desde entonces se le conoce como «El partido del Siglo».

La cantidad de emociones y el dramatismo que envolvió a la definición del encuentro, hizo que sea recordado de esa manera.

Más de 102.000 espectadores presenciaron el encuentro en el Estadio Azteca un 17 de Junio de 1970.

Roberto Bonisegna abrió la cuenta al minuto 8, una ventaja que lograron mantener hasta el minuto final, cuando el defensor Karl Heinz Schnellinger igualó la contienda sobre el minuto 90.

La prórroga fue un canto al fútbol, y a la heroicidad de los 22 futbolistas que estaban dentro del campo de juego.

Frank Beckenbauer jugando con un hombro dislocado, y otros en inferioridad física a consecuencia del desgaste sufrido durante el partido.

El «torpedo» Gerd Müller a los 94 adelantó a los germanos, pero el defensor Tarciso Burgnich a los 98 empató para la «azzurri».

El gran «Gigi» Riva puso a Italia 3-2 a los 104 minutos, pero apareció Müller otra vez a los 110 para empatarlo.

Poco duró la alegría de los «teutones», ya que «el Bambino de Oro», Gianni Rivera, anotó un minuto después el tanto que le daría la victoria a Italia, y el pase a la final.

En el partido decisivo enfrentaría a Brasil, donde caería 4-1, siendo superado futbolísticamente por el equipo liderado por un tal «Pelé», y pagando las consecuencias del desgaste sufrido en el partido ante Alemania.

Italia, dirigida por Ferruccio Valcareggi, jugó ese «partido del siglo» con Albertosi, Burgnich, Facchetti, Cera, Rosato, Bertini, Mazzola, De Sisti, Domenghini, Bonisegna y Riva, ingresando posteriormente Rivera y Poletti.

Por su parte la Alemania de Helmut Schön lo hizo con Maier, Vogts, Patzke, Schulz, Schnellinger, Beckenbauer, Overath, Grabowski, Seeler, Müller y Lohr, ingresando Libuda y Held en la segunda mitad.

Antony Callero

A 30 años de la gran gesta tricolor ante el PSV en Tokio

El 11 de Diciembre de 1988, hace hoy 30 años, Nacional y PSV Eindhoven se enfrentaban en la lejana Tokio para dirimir la supremacía mundial a nivel de clubes, en la final de la Copa Intercontinental.

Chocaban fuerzas los campeones de Sudamérica (Nacional) y de Europa (PSV), un duelo que en lo previo tenía a los holandeses como grandes favoritos, pero…

Los 62.000 espectadores presentes ese día en el Estadio Nacional, vivieron 120 minutos alucinantes, y una definición por penales de infarto.

El mediocampista uruguayo Santiago Ostolaza abrió el marcador a los 7 minutos, Nacional aguantaba a pie firme, hasta que a los 75 el gran delantero brasileño Romario empataba la partida.

Se tuvo que ir a la prórroga, y allí los dirigidos por Guus Hiddink parecían encaminarse a la victoria, cuando el zaguero Ronald Koeman de penalti anotaba el 2-1 a los 110 minutos.

Con el último resto, Nacional se fue arriba en busca del empate, no quedaba nada, centro desde la izquierda de Yubert Lemos y la cabeza de Ostolaza nuevamente para anotar el empate heroico a los 120 minutos.

Y después vendrían los penales…Una dramática definición donde pudo ganarlo el PSV, pero el portero Jorge Seré le contiene el último penalti al danés Soren Lerby, pudo ganarlo Nacional, pero el remate de Pintos Saldanha da en el travesaño, era todo de infarto.

Hasta que llegó el momento cumbre, Seré ataja un nuevo penalti, esta vez a Van Aerle, y Tony Gómez anota el décimo remate para Nacional, que acaba venciendo 7-6, consiguiendo de esa manera su tercera Copa Intercontinental, que en ese momento consagraba al mejor equipo del mundo.

Nacional tocaba la gloria nuevamente con las manos, en un partido alucinante, y ganando en forma heroica, con mucho temple y calidad. 

El conjunto tricolor dirigido por Roberto Fleitas formó ese día con Jorge Seré, Tony Gómez, Hugo De León, Daniel Felipe Reveléz y José Luis Pintos Saldanha; Santiago Ostolaza, Yubert Lemos y Jorge Cardaccio; Ernesto Vargas, Juan Carlos de Lima y William Castro, ingresando Héctor Morán y Daniel Carreño.

Por su parte los de Hiddink ingresaron con Hans Van Breukelen, Eric Gerets, Ronald Koeman, Adick Koot y Jan Heitze; Berry Van Aerle, Soren Lerby Gerald Vanenburg; Wim Kieft, Romario y Jull Ellerman, ingresando posteriormente Hans Gillhaus y Stan Valckx.

Antony Callero    

 

 

River Plate remonta en el Bernabéu para consagrarse campeón por cuarta vez en una final histórica

River Plate es el nuevo campeón de la Copa Libertadores de América, el equipo «millonario» lo ha conseguido tras vencer a Boca Jrs. 3 a 1 después de una prórroga, en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid, escenario «raro» para una final de estas características.

Futbolísticamente el partido fue pobre en líneas generales, especialmente en la primera parte, donde el gol de Boca Jrs. a los 44 minutos fue un oasis en el desierto.

Gran pase del uruguayo Nahitán Nández -un gladiador durante los 120 minutos de juego- para el goleador Darío Benedetto, que mano a mano con Armani definió en gran forma para poner el primer gol del encuentro.

En la segunda mitad el guión ya estaba definido, River tendría la pelota y Boca defendería intentando contragolpear.

El equipo «millonario» jugaba mejor y el gol rondaba la portería de Andrada, y fue así que a los 68, en la mejor combinación ofensiva del partido, Nacho Fernández centra atrás para que el goleador Lucas Pratto anote el empate.

Con los dos equipos muy cansados, el partido se fue yendo rumbo al alargue, el que estuviera mas entero sería el triunfador pero…

Al comienzo de la prórroga llegó una jugada clave que decidió la suerte de Boca Jrs., la expulsión apresurada a mi entender del colombiano Wilmar Barrios, el árbitro uruguayo Andrés Cunha perfectamente lo podía haber solucionado con una amarilla.      

De ahí en más River fue mucho mas, Boca se replegó intentando aguantar hasta los penales, pero el golazo del colombiano Juan Fernando Quintero a los 109 minutos, derrumbaría toda estrategia.

Juanfer fue el revulsivo del encuentro, Gallardo acertó con su ingreso y resultó clave para que pudiera dar vuelta el mismo.

De ahí en más el partido fue una locura, Gago se va lesionado y sin cambios para hacer Boca Jrs queda con 9 hombres, jugando a la heroica, y con el portero Andrada yendo a buscar todos los centros.

La más clara la tuvo Leonardo Jara a los 119, pero su remate da en el poste y se va al corner, de ese lanzamiento de esquina llegaría el tercer gol de River, cuando Gonzalo «Pity» Martínez anota a puerta vacía.

Y allí se desató la locura contenida de todos los hinchas «millonarios», River era campeón por cuarta vez, y nada menos que ante su tradicional adversario.Boca luchó hasta el final pero no pudo, los de Guillermo Barros Schelotto se fueron con la frente bien alta.

Se termina así una final histórica y por demás larga, debido a los episodios que ocurrieron en la previa del segundo encuentro, y que llevaron a que la CONMEBOl decidiera sacar de Argentina la súper final. 

Antony Callero